miércoles, julio 29, 2009
Sólo decir que ya no me duele... fase egoista superada! Me marcho a China en dos horas, feliz verano
martes, julio 28, 2009
Cuando te rompen el corazón
Y ha vuelto a pasar, ayer me rompieron el corazón.
Hoy me permito sentir esa pena egoista que aparece cuando sabes que tu dolor es a causa de la felicidad ajena. Es decir, que tendría que estar contenta porque alguien ha alcanzado su objetivo y sin embargo no soy capaz de hacerlo.
Porque como siempre, y aunque ya esté pensado y hablado infinidad de veces, en el momento que el camino de una persona se separa del mío algo se rompe. Y aunque sepa que es lo mejor para ambos, a quién no le duele un desgarro?
Y no es sólo eso, sino que también siento la inseguridad por cual va a ser nuestra relación a partir de ahora. Y aunque tengo claro que no me echas de tu vida, ocupar otro lugar en tu esfera emocional me cuesta.
Las relaciones paralelas tienen la belleza de las burbujas de jabón. Fascinantes, arrolladoras y efímeras. El sueño rompe y cambia. Así es.
Y también sé que en todo este tiempo yo tampoco he dejado de proyectar y tirar adelante mi vida sin tenerte en cuenta (o sí?).
Llevo tantos años llorándote que de repente se me hace muy difícil compartir tu alegría. En fin, este sentimiento me va a durar poco. Sé que tener un hijo es uno de los mejores proyectos para impulsar tu situación y motivarte para seguir adelante.
Sé que lo harás muy bien. Y que yo jamás te podría dar esta oportunidad. Sé que seguiremos acompañándonos durante muchos años, porque a ambos nos es positivo.
Y sé que me ayudarás a que yo también ponga orden en mi vida, así que desde ahora recorto mi sombra para no quitarte luz, aunque siempre estará cerca de ti para cuando necesites cobijo.
Te quiero, y me alegro por ti y tus buenas noticias de corazón (roto).
domingo, julio 26, 2009
Y con las vacaciones, la calma
Y ya casi se termina la temporada, cuatro días y pongo rumbo a Asia.
Llevos dos meses intensos, he salido del letargo. A trompicones y con más de una caída en el camino, pero muy contenta. Y muy agradecida.
Porque como siempre sigo con mi buena fortuna de encontrarme personas increibles por el camino. Y personas que no sé por qué extraña razón, me quieren.
Y eso es un gran regalo. Y merece ser tratado como tal. Por tanto, mi labor ahora es encauzar las situaciones para darle a cada uno lo que necesita, lo que puede tomar de mí para setirse mejor sin que por ello ninguno de los dos salgamos perdiendo (y sin dejar heridos en las cunetas).
Buena época, bonitas vacaciones en perspectiva. Y ganas de hacer una buena gestión.
Mi único reproche (nunca hay que darse por satisfecho, jeje) es que todo resulta un poco demasiado vainilla para mi gusto. Más madera en septiembre, feliz verano.